Reseña: EL ASESINATO DE SÓCRATES de Marcos Chicot + APOLOGÍA DE SÓCRATES, CRITÓN y CARTA VII de Platón (Edición de Enrique López Castellón). Por Alba Amador.
Título 1: EL ASESINATO DE SÓCRATES.
Autor: Marcos Chicot.
Editor: PLANETA PUB
Número de páginas: 768
Reseña por: Alba Amador.
Título 2: APOLOGÍA DE SÓCRATES. CRITÓN. CARTA VII.
Autor: Platón.
Traductor: Enrique López Castellón.
Edición: AUSTRAL - DEBOLSILLO
Número de páginas: 192
Reseña por: Alba Amador.
Siempre que leo un libro me gusta leer antes la sinopsis del mismo y, si es posible, la opinión de varios lectores. No me gusta adentrarme en un libro sin saber nada de él porque no se debe juzgar su historia por lo que cuenta su portada. Sin embargo he de admitirlo: con El asesinato de Sócrates cometí el error de dejarme embelesar por su título (no a mal, porque al final el libro me gustó, pero de eso hablaré más adelante). El caso es que siempre que leo un libro siento la infinita necesidad de mostrarlo al mundo y gritar "¡Tenéis que leerlo!". Así que qué mejor manera de hacer eso y de paso dar mi más sincera opinión sobre el libro que publicando una nueva entrada en el blog con cada libro que leo.Es este libro, El asesinato de Sócrates de Marcos Chicot, el que me ha empujado a hacer esto porque tengo muchísimas cosas que decir sobre él, opiniones que han estado ocupando mi cabeza desde que leí la primera página del libro. Así pues, me dispongo a contaros, sin destripar el libro, evidentemente, todo lo que tengo que decir acerca de esta maravillosa obra. Pero por la relación que tiene con este primer libro mencionado, voy a hablar también del conjunto de los tres textos de Platón que recoge Enrique López Castellón y de cómo considero necesario que se lean juntos y en el mismo orden que han sido mencionados. Estos textos son Apología de Sócrates, Critón y Carta VII.
Antes de ir a lo interesante, he de indicar una última cosa. Ambos libros tienen en común la filosofía y a Sócrates, algo que parece evidente con tan sólo leer los títulos. Sin embargo yo sólo sé sobre filosofía lo poco que puede aprender una en los dos años de bachillerato y lo poco que he podido aprender de estos libros, por lo que mi opinión es eso, una simple opinión de una simple lectora que acumula cierto interés por estas lecturas. Una vez dicho esto, vamos a lo que verdaderamente importa.
En primer lugar, me parece justo decir que El asesinato de Sócrates está muy bien escrito. Marcos Chicot recoge un vocabulario cuando menos variado y amplio -aconsejo que tengáis a mano un diccionario preparado para buscar la definición de muchas palabras. Por otro lado, el autor consigue describir con tal veracidad los escenarios que puedes imaginarte la ciudad de Atenas como si estuvieras en ella -creo que todos los que sabemos un mínimo sobre Sócrates sabemos también que era de Atenas. En cuanto a todo esto, no tengo ninguna queja.
Por otro lado, yo empecé a leer El asesinato de Sócrates atraída por el título, como ya lo he dicho. Me había leído en primero de bachillerato Apología de Sócrates -pero no los otros dos textos de Platón- y de este libro esperaba algo parecido. Esperaba un libro centrado fundamentalmente en la filosofía de Sócrates y que por tanto me ayudara a entender más todo aquello que Sócrates expone en su apología -se entiende como apología, en este caso, el discurso que da el filósofo tratando de defenderse ante los jueces. Sin embargo, aunque el libro efectivamente me ayudó, el contenido va mucho más allá.
Yo esperaba que el contenido histórico fuese un simple telón de fondo, pero después de haber leído el libro puedo asegurar que tiene mucha más importancia de la que cabría esperar. No es esto algo negativo, sino que simplemente me sorprendió por aquello que ya he dicho que esperaba yo del libro. De hecho, al final, me ha encantado. El autor, como indica en la carta al lector al final del libro, se documentó a través de todos los libros que existieron sobre Atenas y la Guerra del Peloponeso para narrar la historia de todos los personajes.
Así pues, nos encontramos en la Atenas que se enfrentó a Esparta en la Guerra del Peloponeso. En este ambiente, el escritor introduce a Sócrates pero no como un personaje que absorbe toda la trama y el interés del libro. Por el contrario, encontramos las historias de otros personajes, historias sobrecogedoras e increíbles. Entrelazado con estos personajes se desarrolla Sócrates. El libro permite descubrir el modo de vida del filósofo, cuáles eran sus pasiones y a qué dedicaba su tiempo. Descubrimos poco a poco cómo fue ganando amistades y admiración al mismo tiempo que ganaba enemigos, y al final encontramos todo el sentido a lo que dice en su apología. Igualmente, encontramos también en algún momento de la trama a Platón como discípulo de Sócrates. Pero lo mejor de todo es observar el modo en el que los personajes evolucionan en un mundo de guerra y penuria y cómo, a pesar de todo, pueden encontrar cabida para el amor y la familia.
Así pues, tengo que deciros que leáis el libro, que no os arrepentiréis, pero a la vez os advierto que vais a encontrar mucha más historia de la que cabría esperar. De hecho, para mi gusto, a veces demasiada: el autor describe varias batallas con asombrosa exactitud, así como las estrategias de guerra. No es que esto sea algo negativo, sino que yo no soy muy fan de la narrativa bélica.
En cuanto a la relación de este libro con la edición que hace Enrique López Castellón sobre los tres textos de Platón -Apología de Sócrates, Critón y Carta VII-, la vais a entender ahora. Al final de la historia que nos narra Marcos Chicot, aparece, de un modo mucho más simple y breve, aquello que Platón describe en su Apología de Sócrates y en Critón. De este modo, tras haber leído todo el libro, me resultó cien veces más fácil entenderlo de lo que lo hice en su momento cuando leí aquel primer texto de Platón.
Entonces diréis que cuál es la finalidad de leer los textos que Enrique López Castellón recoge. Resulta que éste incluye, con toda su buena intención, una extensa introducción que pretende ayudar a entender esos tres textos del filósofo. Sin embargo, estaréis de acuerdo conmigo en que en unas pocas páginas no se puede recoger toda la filosofía de Socrátes y Platón acompañada de varios acontecimientos históricos. A esta introducción la acompañan en su función muchas anotaciones a pie de página durante todo el libro. Sin embargo, me veo en la obligación de decir que no es suficiente.
Así que creo firmemente que ambos libros han de leerse juntos, primero el de Marcos Chicot y después los textos de Platón. Así podréis entender sucesivamente y desde el principio todo lo que llevó a Sócrates a ser como era y por tanto a su muerte, y cómo todo ello influyó en Platón y en su pensamiento filosófico y, por tanto, en su modo de vida.
Os voy a contar una última cosa sobre los textos del discípulo de Sócrates, pues ya tenéis una idea del argumento del libro de Marcos Chicot, pero quizás también queréis saber lo que vais a encontrar en la edición de Enrique López Castellón. En Apología de Sócrates, como ya he dicho, el filósofo se defiende ante sus jueces de un modo que considero digno de admiración. En Critón se recoge una conversación del filósofo con uno de sus más fieles amigos. Finalmente, Carta VII es una carta que escribe Platón a los familiares y amigos de Dión, quién podría considerarse que fue su discípulo durante algún tiempo. En esta carta se aprecia la evolución del pensamiento político de Platón y cobra mucho más sentido todo lo que se ha leído anteriormente.
En definitiva: ambos libros son dignos de leer para aquellos que tengan curiosidad no sólo por el modo de vida de aquella época y de estos dos filósofos, sino también para aquellos que quieran entender cómo afectó esa vida a su pensamiento. Me veo en la obligación de advertir que debéis de entender la opinión política de los filósofos, sobre todo la de Platón, en el marco de aquella época, pues traerla a la actualidad sería todo un error y podría malentenderse -como ya ha pasado a lo largo de la historia.
Antes de ir a lo interesante, he de indicar una última cosa. Ambos libros tienen en común la filosofía y a Sócrates, algo que parece evidente con tan sólo leer los títulos. Sin embargo yo sólo sé sobre filosofía lo poco que puede aprender una en los dos años de bachillerato y lo poco que he podido aprender de estos libros, por lo que mi opinión es eso, una simple opinión de una simple lectora que acumula cierto interés por estas lecturas. Una vez dicho esto, vamos a lo que verdaderamente importa.
En primer lugar, me parece justo decir que El asesinato de Sócrates está muy bien escrito. Marcos Chicot recoge un vocabulario cuando menos variado y amplio -aconsejo que tengáis a mano un diccionario preparado para buscar la definición de muchas palabras. Por otro lado, el autor consigue describir con tal veracidad los escenarios que puedes imaginarte la ciudad de Atenas como si estuvieras en ella -creo que todos los que sabemos un mínimo sobre Sócrates sabemos también que era de Atenas. En cuanto a todo esto, no tengo ninguna queja.
Por otro lado, yo empecé a leer El asesinato de Sócrates atraída por el título, como ya lo he dicho. Me había leído en primero de bachillerato Apología de Sócrates -pero no los otros dos textos de Platón- y de este libro esperaba algo parecido. Esperaba un libro centrado fundamentalmente en la filosofía de Sócrates y que por tanto me ayudara a entender más todo aquello que Sócrates expone en su apología -se entiende como apología, en este caso, el discurso que da el filósofo tratando de defenderse ante los jueces. Sin embargo, aunque el libro efectivamente me ayudó, el contenido va mucho más allá.
Yo esperaba que el contenido histórico fuese un simple telón de fondo, pero después de haber leído el libro puedo asegurar que tiene mucha más importancia de la que cabría esperar. No es esto algo negativo, sino que simplemente me sorprendió por aquello que ya he dicho que esperaba yo del libro. De hecho, al final, me ha encantado. El autor, como indica en la carta al lector al final del libro, se documentó a través de todos los libros que existieron sobre Atenas y la Guerra del Peloponeso para narrar la historia de todos los personajes.
Así pues, nos encontramos en la Atenas que se enfrentó a Esparta en la Guerra del Peloponeso. En este ambiente, el escritor introduce a Sócrates pero no como un personaje que absorbe toda la trama y el interés del libro. Por el contrario, encontramos las historias de otros personajes, historias sobrecogedoras e increíbles. Entrelazado con estos personajes se desarrolla Sócrates. El libro permite descubrir el modo de vida del filósofo, cuáles eran sus pasiones y a qué dedicaba su tiempo. Descubrimos poco a poco cómo fue ganando amistades y admiración al mismo tiempo que ganaba enemigos, y al final encontramos todo el sentido a lo que dice en su apología. Igualmente, encontramos también en algún momento de la trama a Platón como discípulo de Sócrates. Pero lo mejor de todo es observar el modo en el que los personajes evolucionan en un mundo de guerra y penuria y cómo, a pesar de todo, pueden encontrar cabida para el amor y la familia.
Así pues, tengo que deciros que leáis el libro, que no os arrepentiréis, pero a la vez os advierto que vais a encontrar mucha más historia de la que cabría esperar. De hecho, para mi gusto, a veces demasiada: el autor describe varias batallas con asombrosa exactitud, así como las estrategias de guerra. No es que esto sea algo negativo, sino que yo no soy muy fan de la narrativa bélica.
En cuanto a la relación de este libro con la edición que hace Enrique López Castellón sobre los tres textos de Platón -Apología de Sócrates, Critón y Carta VII-, la vais a entender ahora. Al final de la historia que nos narra Marcos Chicot, aparece, de un modo mucho más simple y breve, aquello que Platón describe en su Apología de Sócrates y en Critón. De este modo, tras haber leído todo el libro, me resultó cien veces más fácil entenderlo de lo que lo hice en su momento cuando leí aquel primer texto de Platón.
Entonces diréis que cuál es la finalidad de leer los textos que Enrique López Castellón recoge. Resulta que éste incluye, con toda su buena intención, una extensa introducción que pretende ayudar a entender esos tres textos del filósofo. Sin embargo, estaréis de acuerdo conmigo en que en unas pocas páginas no se puede recoger toda la filosofía de Socrátes y Platón acompañada de varios acontecimientos históricos. A esta introducción la acompañan en su función muchas anotaciones a pie de página durante todo el libro. Sin embargo, me veo en la obligación de decir que no es suficiente.
Así que creo firmemente que ambos libros han de leerse juntos, primero el de Marcos Chicot y después los textos de Platón. Así podréis entender sucesivamente y desde el principio todo lo que llevó a Sócrates a ser como era y por tanto a su muerte, y cómo todo ello influyó en Platón y en su pensamiento filosófico y, por tanto, en su modo de vida.
Os voy a contar una última cosa sobre los textos del discípulo de Sócrates, pues ya tenéis una idea del argumento del libro de Marcos Chicot, pero quizás también queréis saber lo que vais a encontrar en la edición de Enrique López Castellón. En Apología de Sócrates, como ya he dicho, el filósofo se defiende ante sus jueces de un modo que considero digno de admiración. En Critón se recoge una conversación del filósofo con uno de sus más fieles amigos. Finalmente, Carta VII es una carta que escribe Platón a los familiares y amigos de Dión, quién podría considerarse que fue su discípulo durante algún tiempo. En esta carta se aprecia la evolución del pensamiento político de Platón y cobra mucho más sentido todo lo que se ha leído anteriormente.
En definitiva: ambos libros son dignos de leer para aquellos que tengan curiosidad no sólo por el modo de vida de aquella época y de estos dos filósofos, sino también para aquellos que quieran entender cómo afectó esa vida a su pensamiento. Me veo en la obligación de advertir que debéis de entender la opinión política de los filósofos, sobre todo la de Platón, en el marco de aquella época, pues traerla a la actualidad sería todo un error y podría malentenderse -como ya ha pasado a lo largo de la historia.
Creo que esto es todo lo que tenía que decir. Espero no haber olvidado ninguna de todas las ideas que quería compartir sobre estos libros, aunque no me culpéis si así es, porque éstas me venían mientras intentaba quedarme dormida, cuando las sábanas ya me tenían demasiado atrapada y no era capaz de levantarme para apuntarlas. Igualmente, creo haber dado una opinión bastante completa sobre ambos libros y la relación que existe entre sí.
Si los has leído, ¿cuál es tu opinión?
Reseña por Alba Amador.
Reseña por Alba Amador.
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